La tercera edad es una etapa más de nuestro ciclo vital. Es una época en la que se producen cambios muy significativos. A veces las personas no estamos preparadas psicológicamente para afrontarlos. Estos cambios pueden ir desde el nacimiento de nietos y la jubilación hasta otro tipo de sucesos. Algunas pérdidas están vinculadas a seres queridos, enfermedades, sentimientos de aislamiento y soledad, pérdida de la independencia, de la autonomía, de roles, tristeza y añoranza debido al paso del tiempo y a la pérdida del cuerpo joven entre otros.
A través de la terapia se potencian todos los recursos internos y habilidades personales que han disminuido. Debido a los significativos cambios vitales que van sucediendo, a veces la persona mayor no sabe cómo responder y actuar. Trabajamos también los aspectos neuropsicológicos a fin de prevenir el deterioro cognitivo propio de la tercera edad o en procesos de demencia y/o Parkinson.
A través de este abordaje acompañamos a las personas en esta etapa en la que experimentan diferentes sentimientos, emociones, miedos, ansiedad, angustia, soledad entre otros.
En UNIR trabajamos con las personas mayores para:
- Estimular las funciones cognitivas (atención, orientación, memoria)
- Desarrollar, gestionar y aplicar habilidades sociales
- Entrenar habilidades emocionales, auto-control, afrontamiento de cambios y dificultades vinculadas a la tercera edad
- Ampliar y promover hábitos de vida saludables
- Afrontar y elaborar pérdidas
- Gestionar los sentimientos de soledad
- Adaptarse al modo de vida y al estado de salud física y emocional
- Ampliar la red afectiva y social
- Participar activamente en la sociedad (actividades recreativas, culturales, de ocio)
- Dialogar sobre las necesidades e inquietudes más urgentes
- Transitar el ciclo vital con orientación, apoyo y contención profesional
- Ayudarles en sus procesos de Alzheimer y Parkinson
- Dar rehabilitación neuropsicológica
- Apoyarles en su rehabilitación cognitiva después de haber tenido COVID-19.